Internacionales: La palabra sostenibilidad cada vez hace más eco en todos los sectores, pero en especial, en el mundo de la moda -el segundo más contaminante del mundo según la ONU- que ahora más que nunca está trabajando para desbancarse de ese puesto y desarrollar alternativas para colaborar con el medioambiente.
“Hace años que la Tierra dio un grito de ayuda, y desde entonces cada vez son más las empresas implicadas en trabajar a favor de la sostenibilidad. Existen firmas que han nacido o se han reinventado y crean sus colecciones con materiales orgánicos, sostenibles o reciclados”, afirma Laura Opazo, especialista en moda sostenible.
La economía circular es la clave, ya que este sistema de aprovechamiento y reutilización de los productos, materiales y deshechos permite reducir la acumulación de residuos dándoles una segunda vida, con uso útil durante mucho más tiempo. Pero, ¿de qué tipo de materiales estamos hablando?
Aunque parezca increíble, el sector de la moda está trabajando con materiales que nunca hubiésemos imaginado para crear nuestras prendas, en algunos casos, incluso de lujo:
Fibra de piña: cuyo nombre comercial es Piñatex, ha sido desarrollada por una doctora español. Se presenta como alternativa de cuero natural hecha de fibras de celulosa extraídas de hojas de piña, PLA (ácido poliláctico) y resina a base de petróleo. Este material destaca por ser fuerte, flexible, transpirable, suave y que permite la personalización, es decir, labrar su superficie para conseguir diferentes efectos.
Cuero de hongos: esta fibra textil es un material cien por cien vegetal, proveniente de los hongos que habitan en los árboles a menudo durante años, y produce cuerpos frutales polypore muy grandes. Su consistencia y texturas van desde la suavidad de la superficie, muy similar al ante o al terciopelo, hasta una parte un poco más dura que recuerda al corcho. Entre sus propiedades destacan que es un material aislante, repelente del agua, antimicrobiano, libre de productos químicos, compostable y visualmente similar al cuero animal pero vegano, con propiedades altamente absorbentes, antibacterianas y antisépticas. La firma de investigación y desarrollo Sporatex se enfoca en la elaboración de un biotextil de hongos.