El expresidente Leonel Fernández alertó ayer sobre los riesgos en el mundo en medio de las tensiones geopolíticas y conflictos que se registran en diferentes regiones del planeta, pese a que la economía estadounidense, un referente para los mercados financieros, ha enviado recientemente señales de optimismo con las reducciones de las tasas de interés.
El líder político recordó que hace apenas un par de semanas, la Reserva Federal bajó las tasas de interés en 50 puntos básicos, considerando que la inflación está dentro de la meta del 3%.
Consideró que esa medida envió una señal positiva de que la economía estadounidense supera los temores de que no sería capaz de tener un aterrizaje suave después de las turbulencias vividas durante y después de la pandemia del Covid-19.
“Los mercados han respondido positivamente a esta decisión de las más altas autoridades monetarias en los Estados Unidos y esperan que se produzcan más recortes antes de fin de año”, manifestó.
Fernández hizo las reflexiones en la apertura de un foro en su calidad de presidente y fundador la Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode) y su institución hermana en Estados Unidos, la Global Foundation for Democracy and Development (GFDD).
Las entidades organizan el foro en coordinación con el Centro de Economía y Política de Desarrollo (CDEP, por sus siglas en inglés). El evento cuenta con el apoyo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas (CEPAL), el Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Columbia (ILAS) y el think tank Global Americans (GA).
Fernández expresó, sobre las tensiones geopolíticas y conflictos en diferentes regiones del planeta, que el más antiguo y persistente tiene lugar en el Medio Oriente.
Recordó que hace casi exactamente un año, el 7 de octubre, un ataque terrorista en Israel, liderado por el grupo militante Hamás, que mató a 1,200 personas, ha provocado una guerra sangrienta en Gaza, donde ya han sido eliminadas más de 40,000 personas, en su mayoría civiles, y más de dos millones han sido obligadas a abandonar sus hogares.
Últimamente, -relató el exgobernante- el escenario militar se ha trasladado al sur del Líbano, donde la cúpula de Hezbolá ha sido prácticamente decapitada, incluido su principal líder, Hassan Nasrallah.