Noticias en la Red "DVE" Al extremo con la verdad
Artículos relacionados
El cuarto hijo de Marcus Semien y su esposa Tarah nacería durante la Serie de Campeonato de la Liga Americana.
Cuando su médico le dijo que estaba lo suficientemente avanzada como para que fuera seguro inducirla, Tarah le dijo a la segunda base de los Rangers de Texas que tendrían a su bebé en el receso antes del primer partido de la serie contra Houston el domingo por la noche.
Semien dijo que su esposa le informó del plan el martes, momentos después de que los Rangers terminaron una barrida de tres juegos en la Serie Divisional sobre Baltimore.
«Una vez que ganamos ese juego, vi a mi familia, los abracé y Tara dijo: ‘Vamos a inducir'», dijo el sábado. Así es como lo descubrimos».
Semien se reincorporó al equipo el viernes después de pasar un par de días con su familia por el nacimiento de su primera hija, Amelie Carol Anne. La pareja fue a un hospital el miércoles, y su bebé nació alrededor del mediodía del jueves.
Tanto la madre como el bebé están bien, y la pequeña Amelie se une a una familia que incluye a sus hijos Isaiah, Joshua y Eli.
Semien dijo que era la primera vez que la pareja inducía el parto. Sintieron que era importante hacerlo para asegurarse de que no se perdiera el nacimiento.
«Programamos una inducción durante los días que teníamos libres para que yo pudiera estar allí», dijo. «Y eso fue diferente a todo lo que hemos hecho en el pasado, pero Tara accedió a ir en ese momento».
Semien dijo que sus hijos estaban muy emocionados de tener una hermanita.
«Tiene protectores», dijo. «Creo que Tara no estaba abrumada ayer, pero querían estar encima de ella. Y es algo hermoso».
Los segundos nombres de Amelie son un tributo a las personas de su familia. Carol es el nombre de la abuela de Semien y Anne es el segundo nombre de la madre de su esposa.
No fue una sorpresa para el manager de Texas, Bruce Bochy, que Semien programara el nacimiento de su bebé para un día libre. Semien y el antesalista de Seattle, Eugenio Suárez, fueron los únicos de la Liga Americana que jugaron en los 162 partidos de esta temporada.
«Es el sueño de cualquier mánager», dijo Bochy. «En un lugar en el que nunca tuve que pensar en quién iba a jugar allí o quién iba a batear allí. Es implacable con su ética de trabajo y su capacidad para salir todos los días».
